sábado, 18 de diciembre de 2010

XXVII

Soledad, frío, caricias, grito;
llanto enemigo, salado, baldío,
efimero anillo, mirada, despido;
oscuridad, partido escribo. Así no

jueves, 21 de octubre de 2010

XXVI

inocencia, tórrido óbito en descomposición
tras defenestrar mi musa de octubre,
¿donde estará mi pequeña estrella de oriente?
de seguro no bajo mi abrazo sin lumbre;
me quema y arde el estomago
de sabores que por imaginar me turben,
pero desfallezco sin besos
y se enroca mi conciencia sin sus aludes.

martes, 3 de agosto de 2010

XXV

volví a soñar contigo,
con tu ausencia,
con tus besos e indiferencia,
volví a llorar marchito.
volví a desear no despertar de mi nido,
sin recuerdos e impotencia,
sin tu esencia,
volví a desear no haber existido.
por que el salitre,
en mi boca,
golpea deja triste
y destroza
mis quemados ojos con tu imagen al irte
y mis manos húmedas de congoja.

martes, 20 de julio de 2010

XXIV

He vuelto a perderte,
fragmento de penumbras
que de Apolo escondes,
junto a mi nunca-
jamas y su campanilla
quedo solo ante duda
si volveras para quedarte.

XXIII

En mi que te acomodas
Ares, en destierro del alma,
porque repito mi mal
del odio y del que ama;
yo que me defenestro
en pos de tu salva,
Sión que mi regreso esperas
en regazo de calma.

XXII

Ignoto destino
alúmbrame ante la duda
tu, que todo sabes
de mi ser, la pulpa
abre del fruto del conocer.
Sin probar el vino tu uva
mi camino se borra,
dejame ver de mi, mi culpa,
que yo buscaré donde soñar.

lunes, 5 de julio de 2010

XXI

Hielo, hielo que quiebra
rompe y quema el corazón,
desazón de la apatía,
hiedra que trepa la sin razón.
En bosque y enredadera
transformose el jardín de pasión,
sin luz ni calor
tan solo la sombra del tiempo
y el tiempo del dolor.

(simplemente)

sábado, 6 de febrero de 2010

XX

Morada que guarda tu desvelo
intencionado tras velo gris,
empatía que esconde lo mordaz
ni luz ni tinieblas tras el ardiz,
tiembla la voz y gritan los ojos
escondiendo miradas tras el tapiz,
muerden palabras besan las manos
estrechando las verdades que no deseas decir