miércoles, 10 de agosto de 2011

XXXV

Derramando la fuente
en mis manos vacias,
cascadas de recuerdos
y la impotencia cristalina
que desciende acera
para desembocar en alcantarilla.

XXXIV

Entre tu infierno
y la luz de un lucero
anida mi ahogo,
un grito incierto
que quema por dentro
y hace de "San Lorenzo" sollozo;
como recuperar mis anhelos
y mi mirada sin salinos velos
si no puedo luchar con lo que conozco.


(intimismo experimental)